Reconocida por su belleza y talento hollywoodense, Angelina dejó de ser, hace unas semanas atrás, el personaje de película para convertirse en una mujer de carne y hueso, que tuvo que afrontar una de las decisiones más duras: extirpar sus dos senos, por un riesgo del 87% de padecer cáncer.
Una carta publicada en el New York Times dio la señal de alerta. La compañera sentimental de Brad Pitt y la actriz filántropa por excelencia se había sometido a una tenaz cirugía para retirar sus senos. El motivo: una alerta de cáncer de mamas, descubierta tras varios estudios médicos. Entre resonancias magnéticas y ecografías, Angelina se realizó un test donde se determinó que portaba el gen defectuoso, conocido como BRCA1, y que en su caso implicaba un 87% de riesgo de padecer cáncer de mama en un futuro, a lo que se suma un 50% de cáncer de ovarios, lo que supondría una segunda operación.
Al parecer, la extenuante busqueda de respuestas médicas tiene que ver con el hecho de que tanto la madre como la abuela de Angelina murieron con cáncer a los ovarios.
La publicación del hecho en el medio de comunicación, por parte de Angelina, responde a la necesidad de generar conciencia en las mujeres sobre la enfermedad y la importancia de la prevención. “Para cualquier mujer que lea esto, espero que le ayude a saber que tiene opciones. Quiero alentar a las mujeres, especialmente si tienen un historial familiar de cáncer de seno u ovario, a buscar información y expertos médicos que puedan ayudarlas con este aspecto de su vida y a tomar sus propias decisiones informadas”.
“Como nota personal, no me siento menos mujer. Me siento poderosa porque tomé una decisión fuerte que de ninguna manera disminuye mi feminidad”, agregó.
Los detalles
La especialista Kristi Funk atendió el caso de Angelina en el centro Pink Lotus Breast Center en Beverly Hills. Tras una primera intervención para extraer una pequeña porción de tejido para analizar, se procedió, el 16 de febrero, a la masectomía bilateral, de caracter preventivo. Aunque por lo general, en el 2 y 8% de las intervenciones se hallan rastros de cáncer, en el caso de la actriz, el área estaba totalmente sana.
Se procedieron a colocar expansores para la reconstrucción de los pechos. El 27 de abril, se realizó esta intervención en la que se colocaron implantes en forma de lágrimas. Funk indicó que incluso se uso capas de tejido de cadáver para crear una supeficie dura bajo el implante, con el fin de que el efecto sea más natural