Cuando tuvimos que decidir qué destino visitar para esta edición de Novias, Italia salió como el sitio imperdible para el romanticismo e ideal para esa Luna de Miel tan esperada. Pocos lugares son tan de arte , significativos y encantadores: el país de la Dolce Vita es un destino para visitar en pareja.

Texto y Fotos: Leonardo Ampuero R. (IG: @AmpueroLeonardo)

Más allá de Roma, y ese centro neurálgico que fue su poderío en el imperio, lleno de obras mentos, colosales coliseos, torres y palacios; el País de la Bota va más allá de un expresso, pizzas y manteles de cuadros rojos. Recorrer lo de Sur a Norte, te puede dar una visión más global, dinámica y específica de que no todo son las postales que conocemos. Indudablemente, todos queremos visitar en su capital una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno; Caminar por Via Condotti, Via del Corso, Campo de’ Fiori hasta llegar a la Via della Conciliazione; Visitar los Museos del Vaticano, la Basilica di San Pietro, el Pateón, las Catacumbas, el Foro Romano, el Castillo de San Angello… y puedo seguir…; pero, una vez que los must visit quedan tachados en tu lista de viaje, la magia de la Italia real comienza a aparecer.
Si bien el Coliseo fue la máxima alusión de poder y grandeza del antiguo imperio; Italia se ha sabido readaptar a todos los tiempos, siendo en la actualidad referente contemporáneo de Gastronómia, Diseño y Alta Costura.
Viajamos desde Alberobello, pasando por Roma, Pisa, Florencia, Venezia, Parma, hasta llegar a Trentino Alto Adige; enamorándonos de sus paisajes, arte, cultura y gastronomía… ¡mamma mía!
Tratar de resumir todo lo que Italia tiene para ofrecerte, es quedarse corto: Caminar de la mano con tu pareja por senderos de piedra y maravillarte de los “Trullos” (cabañas de Piedra caliza encalada) en Alberobello; vibrar con los olores y colores de sus mercados; visitar los primeros asentamientos humanos prehistóricos trogloditas, Patrimonio de la Humanidad, en Matera; probar un Spaghetti Ai Ricci Di Mare (Spaguetti con erizo de mar) en Tutino; sentir la brisa mediterránea en tu cara cuando viajas por tren frente a sus costas; visitar una de sus tantas iglesias y sorprenderte en una de sus paredes con la “Crocifissione di San Pietro” de Caravaggio, tomarte el mejor Capuccino del mundo teniendo en frente la Torre de Pisa; sentirte medieval con sus castillos en Padua; brindar escogiendo una de sus 350 cepas con uno de los mejores vinos del mundo; acompañarlo de un aperitivo de prosciutto y olivas verdes de la zona de la Toscana; jurar tu amor frente a los alpes en Trentino Alto Adige cerca de la frontera Austriaca son, sin lugar a dudas, motivos suficientes del porqué Italia es un destino de ensueño.