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La esposa del monarca aseguró que se encuentra estable tras su diagnóstico
Por Redacción Cosas. Foto: Shutterstock
La Reina Camila asistió a un concierto benéfico celebrado en la Catedral de Salisbury este jueves. Este evento marca el primero de una serie de compromisos oficiales que la reina consorte deberá asumir sola, luego de que su esposo, el rey Carlos III, fuera diagnosticado con cáncer.
La Familia Real compartió la noticia del inicio del tratamiento del monarca británico a través de un portavoz, generando una ola de preocupación y muestras de apoyo hacia la reina Camila. En el concierto, la soberana no solo mostró su agradecimiento por el afecto recibido, sino que también rompió el silencio sobre la salud de su esposo, coronado en mayo pasado.
Con una tímida sonrisa y aparente serenidad, la reina expresó: «Está extremadamente bien, dadas las circunstancias. Estamos muy conmovidos por todas las cartas y mensajes». Este comentario surgió mientras compartía un cálido momento con Ben Abbot, un paramédico de 40 años, reflejando la conexión entre la familia real y el pueblo británico.
El concierto tenía como propósito recaudar fondos y concienciar sobre la labor de diversas organizaciones sin ánimo de lucro en la zona. Durante el evento, la reina Camila demostró su gracia al interactuar con representantes de estas asociaciones, resaltando su compromiso con las causas benéficas.
Este encuentro público marcó el retorno de la reina a la esfera pública desde el impactante anuncio sobre la salud del rey Carlos III. La noticia del cáncer, cuyo tipo no ha sido revelado, llegó poco después de una operación para abordar problemas derivados del agrandamiento de su próstata.
