El Castillo de Windsor se convirtió en una pista de carreras

El hijo de William y Kate llevó su pasión por los autos al castillo

Por Redacción Cosas. Foto: Getty Images

Medios británicos a la Familia Real británica afirman que el príncipe Louis se divierte conduciendo su vehículo eléctrico de juguete a gran velocidad por las extensas 40 hectáreas de propiedad privada que abarca el Castillo de Windsor.

Según se comenta, al niño de cinco años, quien es el benjamín de William y Kate, príncipes de Gales, le encanta explorar los jardines de la residencia real. Se desplaza con su pequeño vehículo a sus anchas, aunque siempre bajo la atenta supervisión mientras conduce.

“Louis puede usar los caminos que atraviesan Frogmore Gardens como una pista de carreras y es completamente privado. La reina solía usar el área para montar a caballo y llevar a sus perros. Ahora, Andrés y Fergie van allí con los corgis. Es tranquilo y alejado del público, por lo que es ideal para Louis”, dijo una fuente del medio The Sun.

Seguro que en un futuro, será improbable que el príncipe Louis pueda seguir una carrera como piloto de carreras. Dado su estatus como miembro de la Familia Real británica, es probable que deba enfocarse en responsabilidades relacionadas con los deberes reales.

No obstante, la supuesta inclinación del hijo menor de William y Kate por conducir su vehículo de juguete por los jardines de Windsor no sorprendería a nadie. Esto se debe a que tanto su padre como su tío, el príncipe Harry, así como su abuelo, el rey Carlos III, fueron pilotos en el pasado. Además, su difunta bisabuela, la reina Isabel II, era conocida por manejar su propio automóvil, lo que sugiere que la pasión por la velocidad corre en la familia.

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